Germina tus propias semillas con los niños

Germinar semillas con ninos

Inicia a los niños al cultivo con la germinación en tarros

Germinar nuestras propias semillas en tarros es una idea estupenda para que los niños aprendan de forma sencilla cómo crecen y se desarrollan las plantas. Y por tanto, es un paso muy interesante si queremos crearles interés por el cultivo.

¿Por qué? Pues bien, germinando en tarros de cristal los peques ven en directo el crecimiento de los brotes y se hacen cargo de un ser vivo de forma sencilla para poder trasladarlo más adelante al huerto urbano o la siembra exterior.

Qué necesitamos para germinar en tarros

  • 1 frasco de vidrio con boca ancha (1 litro).
  • 3 cucharadas de semilla bien lavada (lenteja, soja, trigo, garbanzo, etc…).
  • 1/2 litro de agua.

3 pasos sencillos para germinar en tarros

Paso 1: Deberemos lavar bien las semillas y colocarlas en el tarro de cristal con el agua. En la boca del tarro colocaremos una tela o gasa delgadas para evitar que entren insectos y dejaremos el tarro en un lugar cálido y oscuro alrededor de 10-15h.

Paso 2: Después, sin quitar la tela o gasa para evitar que las semillas se caigan, escurriremos el agua y enjuagaremos las mismas con agua templada para volver a colocarlas en un lugar cálido y oscuro dentro del tarro de cristal (al principio las enjuagaremos entre 2 o 3 veces al día y después 1 vez al día).

Paso 3: Cuando los brotes tengan 2 o 3 cm de largo comenzaremos a exponerlos al sol de forma indirecta durante alrededor de 2 h al día. ¡Y por fin los germinados estarán listos!

Ya puedes empezar a ponerlo en práctica con los peques, ¡verás qué rápido sienten interés por la jardinería!

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