¿Tienes una o varias estanterías metálicas o algún otro mueble metálico y has descubierto que tienen algún arañazo o grieta que los afea?
No te preocupes porque tiene solución, y este tipo de imperfecciones son fácilmente arreglables con un poco de paciencia y de ganas por volver a disfrutar de un mueble perfecto. Pero antes de empezar, debes saber que este tipo de restauración es aconsejable hacerla con suavidad y lentitud para evitar dejarlo peor de lo que está, y repara los arañazos o grietas de tu mobiliario metálico.
REPARA LOS ARAÑAZOS DE TU MOBILIARIO METÁLICO
En primer lugar tendrás que comprobar la profundidad de los arañazos que estropea tu mobiliario metálico. Y es que en función de ésto llevaremos a cabo un tipo de técnica de reparación u otra. En el caso de que el arañazo sea superficial, el arreglo será tan sencillo como pulir un poco la superficie. De esta manera recuperará su homogeneidad.
Si por el contrario, la superficie está dañada por un arañazo más profundo tendremos que acudir a los abrasivos o, en caso de que quieras evitar posibles ‘destrozos’, una nueva mano de pintura. Si la segunda opción es la que más te convence, lo primero que tendrás que hacer es conseguir una pintura igual que la del mueble, dar una capa de esa pintura al arañazo y barnizándolo posteriormente. Por último, y para conseguir un mejor resultado, cúbrelo con cera… ¡Y como nuevo!
Sin embargo, si te interesa pulir el metal con abrasivos, la mejor opción para conseguir un mejor resultado será el papel de lija al agua, pues te permite lubricar con aceite, lo que te ayuda a evitar marcas indeseadas. Empieza primero por un papel de grano grueso , continúa con uno de grano medio y termina por uno de grano fino. De esta manera, las rayas que provoca la lija serán cada vez más pequeñas y la superficie quedará más homogénea.
DATO: No utilices abrasivos en caso de que quieras reparar metales con pátinas, plateados o chapeados.
REPARA LAS GRIETAS DE TU MOBILIARIO METÁLICO
Cuando hablamos de grietas está claro que el proceso requerirá de un poco más de trabajo. Pero no te preocupes, es muy sencillo. Para solucionar este problema tendrás que acudir a las masillas sintéticas (con base de resinas epoxy aptas para trabajar con metal). En caso de que tu mobiliario sea metálico, podrás mezclarla con polvos metálicos. Si por el contrario, está pintado, tendrás la opción de mezclar la masilla con pigmentos del color deseado. De esta forma quedará disimulado el relleno una vez seco. Si la masilla resulta difícil de manipular, espésala añadiendo caolín.