Sembrar con niños, ¿cómo hacerlo?

Con las vacaciones de los peques, llega un punto en que no sabemos qué hacer con ellos. Porque no vale con que estén entretenidos entre pantallas, también deberían aprovechar el tiempo libre para aprender nuevas cosas divirtiéndose. Y una actividad súper interesante es la siembra en familia.

Está claro que la actividad tendremos que enfocarla para ellos, no deberemos esperar conseguir grandes cosas, pues sembrar no es fácil, pero sí puede convertirse en un juego de niños. Porque… ¿Qué puede haber más chulo que ver crecer una planta y conseguirlo gracias al trabajo en equipo de la familia? ¡Pocas cosas!

Por eso, hoy queremos compartir con vosotros una serie de consejos para que esta nueva afición sea divertida y constructiva. ¡Vamos a pasarlo bien juntos!

Consejos para sembrar con niños

1. Paciencia: No se trata de conseguir un resultado fantástico y cultivar un montón de plantas en un día. Es un juego en familia y la finalidad es divertirse.
2. Los niños son súper curiosos y todo lo quieren saber, ¡aprovechad esto! Así que conforme vayais avanzando, idles explicando cómo se hace y sobre todo con qué finalidad.
3. Que se ensucien: Sí, debéis dejarles tocar, probar, hacer… ¡No lo hagáis todo vosotros! Sobre todo porque terminarán aburridos como ostras.
4. Que tomen decisiones: Ya que queremos que los peques se sientan parte fundamental en el proceso, podemos empezar por dejarles elegir qué cultivar, qué les gustaría comerse una vez crezca, de qué colores quieren que sean las flores… ¡Que sepan que su opinión es importante!

Y una vez tengáis esto claro… Sólo tenéis que poneos manos a la obra. Si ya disponéis de los elementos necesarios en casa, ¡una cosa menos! Si no, a por los utensilios, ¡y aprovechad para ir con los peques!

¿No te gustaría comenzar a sembrar con niños? ¿Lo has hecho alguna vez antes? ¿Cómo fue tu experiencia? ¡Cuéntanos!