Cada vez más, el reciclaje se está convirtiendo en algo habitual y fundamental en nuestras vidas. Pero además del reciclaje en cuestión de separación de la basura al tirarla al contenedor, también podemos reciclar o reutilizar esa basura antes de tirarla.
Esta acción no sólo es súper ecológica, sino que además puede ayudarte a ahorrar, desarrollar tu creatividad e imaginación y enseñar a los más peques que un objeto puede tener muchas vidas.
¡Algunos ejemplos para reutilizar!
- Ropa: La ropa no es simplemente ropa, es tela, hilos, costuras… Lo que significa que podemos verla no sólo como un simple jersey, sino como un conjunto de posibilidades. Haz cortos unos pantalones largos inútiles como tal, tiñe la camiseta que se manchó de pintura, crea nuevos objetos como una mochila a partir de un simple vaquero… Y si no… ¡Dónala! Pero nunca, nunca la tires.
- Botellas y vasos contenedores de comida (cacao, mermelada…): Este tipo de objetos son especialmente reutilizables como motivos decorativos, jarrones…
- Ladrillos: Aunque a simple vista un ladrillo no parece tener nada interesante… ¡Échale imaginación y verás! Portabotellas, patas de mesa baja, puff, sujeta libros…
- Electrodomésticos: Los electrodomésticos pequeños son muy reutilizables, quizás no como electrodoméstico, pero sí como elemento de decoración, guarda cosas…
- Neumáticos: Si tienes jardín ¡estás de suerte! Ya puedes empezar a reutilizar tus neumáticos viejos… ¡Sí! Crea un columpio para los peques, invéntate un nuevo juego…
- Muebles: Si te gustaría darle un nuevo aire a tu casa… No hace falta que compres muebles nuevos, simplemente ¡renuévalos tú! Un poco de trabajo y de imaginación… ¡Y tendrás casa nueva!
¡Recicla, reutiliza y revivirás!